La empresa internacional Ceva Logistics tiene previsto cerrar su centro en Neuendorf (SO) a finales de año y despedir a 350 personas. El sindicato Unia reclama un plan social que ofrezca ayudas concretas a las personas afectadas y evite casos de especial gravedad.
Tras el procedimiento de consulta, Ceva Logistics ha confirmado el cierre de la empresa y el despido colectivo de toda la plantilla. Se prevé que 350 personas - 212 empleadas con carácter fijo y 138 de manera temporal - pierdan su empleo. La gran mayoría son mujeres que han estado gestionando las devoluciones de Zalando, durante años, con salarios de dumping.
Por un lado, las trabajadoras y trabajadores, cuyas condiciones laborales ya son extremadamente precarias, pierden sus ingresos; por otro, dos grupos multimillonarios eluden sus responsabilidades: Ceva Logistics, perteneciente al grupo francés CMA CGM, propiedad del multimillonario Rodolphe Saadé, y el gigante del comercio electrónico Zalando. Las personas empleadas están muy decepcionadas con la actitud de estas empresas. Ceva Logistics sigue negándose a negociar un plan social. A pesar de todas las declaraciones de apoyo a las personas afectadas, la única medida adoptada por Ceva Logistics es enviar a la gente a la Oficina Regional de Empleo (RAV-ORP-URC). Además, incluso en esta situación tan difícil, sigue presionando al personal ofreciendo una posible indemnización por despido solo a «las empleadas y empleados leales».
El Unia exige que Ceva Logistics y Zalando financien un plan social digno de ese nombre. El personal ha exigido lo mismo en una petición ampliamente respaldada. Incluye medidas como asesoramiento para encontrar un nuevo empleo, ayuda para la reorientación profesional, una indemnización por despido de entre 3 y 6 meses de salario, así como apoyo especial en casos de extrema gravedad. Dicho plan social debe negociarse con el personal y su sindicato.
Un plan social justo sería el mínimo que se merecen las personas empleadas, tras trabajar durante mucho tiempo, bajo condiciones deplorables, para aportar suculentos beneficios a ambas empresas. Es posible que Zalando defienda una mentalidad de usar y tirar con su «moda rápida», pero lo que no se puede aceptar es que trate al personal de los centros logísticos como mercancías desechables.