Actualmente se están produciendo varios ataques masivos contra la protección de los trabajadores y trabajadoras en la ley laboral. La ley laboral es la ley fundamental que regula los horarios de trabajo y la protección de la salud. Los empeoramientos previstos suponen un gran peligro para la salud de los trabajadores y trabajadoras. Y es que las largas jornadas laborales y los periodos de descanso reducidos son un factor de riesgo directo para el burnout o agotamiento, los trastornos del sueño, las enfermedades cardiovasculares y la depresión.
El Parlamento está debatiendo una revisión de la ley laboral que podría afectar a millones de trabajadoras y trabajadores y empeorar enormemente su vida laboral y familiar. En el futuro, las y los trabajadores tendrán que trabajar hasta nueve domingos al año durante cinco horas sin necesidad de autorización, por orden del empleador y sin suplemento salarial. Además, se prevé ampliar la jornada laboral diurna y vespertina hasta 17 horas y reducir el tiempo de descanso legalmente establecido a solo nueve horas, con la posibilidad de interrumpirlo. Para verse afectado por esta drástica desregulación, basta con disponer de un poco de flexibilidad horaria y poder realizar una mínima parte del trabajo fuera de la empresa (lo que se conoce como «teletrabajo»). Prácticamente se insta a los empleadores a introducir esta medida, ya que así las y los empleados estarán a su disposición entre las 6 y las 23 horas y podrán hacerles trabajar también los domingos, sin suplementos. Bajo el pretexto de la «flexibilización», lo que en realidad se está debilitando es la protección de las y los trabajadores.
Por iniciativa del cantón de Zúrich, el Parlamento federal está trabajando además en un proyecto de ley que pretende ampliar de 4 a 12 el número de domingos en los que se permite vender sin autorización. Esto a pesar de que el día a día en el sector comercial ya se caracteriza por una gran presión y horarios irregulares. La iniciativa pone en peligro la salud y la vida social del personal del sector del comercio, así como del personal de limpieza, logística y seguridad. El Unia, junto con el Syna, ha presentado una petición con 9000 firmas en contra de esta propuesta.
Las dos propuestas suponen un gran peligro para la salud de las y los trabajadores. Amenazan con jornadas laborales más largas, menos descanso, más presión, disponibilidad constante y un mayor debilitamiento de la prohibición de trabajar en domingo. El Unia se opone a estos ataques masivos contra la protección de la salud y los derechos de los trabajadores. Es necesario reforzar, en lugar de debilitar, la protección de la salud y la conciliación de la vida laboral, familiar y personal.
Noémie Zurlinden, economista del Unia
Petición:¿Comercios abiertos 12 domingos al año? ¡No, gracias!