Las delegadas y delegados aprueban la resolución frente a los ataques de la Ley Laboral. Foto: Manu Friederich
Trabajo
Política
Asamblea de delegadas/os de la USS sobre los ataques a la Ley Laboral

«Flexibilidad» a costa de las y los trabajadores

- Hilmi Gashi

Las y los delegados de la Unión Sindical Suiza (USS) se oponen claramente a los ataques contra los períodos de descanso y a la ampliación prevista del trabajo dominical. La USS convocará un referéndum si el Parlamento confirma la decisión del Consejo Nacional y aprueba el trabajo dominical generalizado y jornadas laborales excesivamente largas, que podrían alcanzar hasta 17 horas.

Las y los trabajadores ya están soportando una carga enorme. Tras cinco años de estancamiento salarial y jornadas laborales excesivas, lo que se necesita ahora son límites claros y una mayor protección de la salud, en lugar de una disponibilidad aún mayor para las empresas. El descanso dominical y los tiempos de descanso definidos están cada vez más amenazados. Los horarios cambian con muy poca antelación, muchas personas trabajan hasta altas horas de la noche y la exigencia de disponibilidad durante los fines de semana no deja de aumentar. Las consecuencias son evidentes: mayor estrés psicológico, molestias físicas y un incremento significativo de las ausencias por enfermedad. La situación es especialmente dura para las madres y padres que trabajan, a quienes se les dificulta cada vez más la conciliación y la planificación de su vida cotidiana. Esta precariedad golpea sobre todo a quienes perciben salarios bajos y carecen de margen de elección: mujeres, personas con responsabilidades familiares y de cuidados, y personas empleadas en el sector del comercio, los cuidados, la hostelería-restauración y la logística, en su mayoría personas migrantes. Para estas personas, la llamada «flexibilidad» no es una opción, sino una imposición. Trabajar los domingos tiene consecuencias negativas tanto en la vida familiar, como en el descanso y la salud.

 

La espiral de precariedad sigue girando

A pesar de los problemas ampliamente conocidos que estas medidas provocan en las y los trabajadores, en sus familias y, especialmente, en su salud, los empleadores y las fuerzas burguesas del Parlamento continúan impulsando proyectos de ley que amplían de forma drástica la jornada laboral. En el sector del comercio, los cantones podrán autorizar hasta doce domingos de apertura al año, en lugar de los cuatro actuales. Aún más grave es la revisión de la Ley del Trabajo y del Código de Obligaciones aprobada por el Consejo Nacional, que permite el trabajo dominical sin autorización previa en oficinas y en casi todos los sectores, y normaliza jornadas laborales excesivas que se extienden desde primeras horas de la mañana hasta última hora de la noche.

Bajo la etiqueta «teletrabajo» se está socavando la protección

Más de 1,5 millones de trabajadoras y trabajadores se verían directamente afectados por estas medidas. El Consejo Federal minimiza los riesgos y se alinea con los intereses de los empleadores. Ante esta situación, las y los delegados de la USS han acordado por unanimidad unas líneas rojas inequívocas: no a la ampliación del trabajo dominical; no al debilitamiento o la reducción de los tiempos de descanso; y no a la prolongación de la jornada laboral diaria. Exigen, además, normas claras que impidan obligar a las y los trabajadores a trabajar fuera de los horarios actualmente vigentes. Si el proyecto es aprobado por el Parlamento, como ya ha ocurrido en el Consejo Nacional, la USS lanzará un referéndum.