Un congreso marcado por un espíritu combativo y solidario.
Migración
Política

Unidas/os por la justicia social

- Emine Sariaslan

En el 5º congreso ordinario del sindicato Unia, celebrado en Brig, se reunieron 400 delegadas y delegados bajo el lema: «Unidos/as por la justicia social». En los dos días de congreso fijaron las prioridades políticas, eligieron a las y los representantes en los diferentes gremios y lanzaron un claro mensaje por un futuro solidario.

En su discurso inaugural, la presidenta del Unia, Vania Alleva, advirtió sobre el auge de las fuerzas de la derecha y pidió un compromiso firme por la protección salarial, los derechos de las y los trabajadores y la participación democrática, subrayando la importancia del compromiso colectivo: «El miedo y la desesperanza nos hacen perder el rumbo. Los tiempos duros deben impulsarnos a reforzar nuestro compromiso con la solidaridad, la justicia, los derechos para todas y todos y la participación democrática. En estos tiempos difíciles, los sindicatos son más importantes que nunca», afirmó Alleva.

¡Proteger los salarios, ampliar los derechos!

El primer día del congreso se centró en la protección de la libre circulación de personas y la lucha contra la iniciativa del partido SVP/UDC para limitar la inmigración. El Unia dejó claro que la igualdad salarial, por el mismo trabajo, en el mismo lugar, sigue siendo innegociable. Representantes del Grupo de Interés Migración, como Sudabeh y Olga, destacaron la responsabilidad del sindicato en la lucha contra el racismo estructural y la división social. «Las personas migrantes trabajamos mucho y, sin embargo, a menudo, no disfrutamos de los mismos derechos, ni del mismo reconocimiento que la población suiza. A los ricos y poderosos les interesa que estemos divididos: en suizos y extranjeros, en «nosotros» y «los otros», en «legales» e «ilegales». Pero nosotros decimos: ¡Basta! No nos dejaremos dividir, lucharemos juntos por nuestros derechos».

Más derechos para las personas migrantes

Las y los delegados también exigieron, de manera clara, un derecho de residencia permanente, en lugar de permisos precarios. Rechazaron las expulsiones por recibir ayuda social y solicitaron el reconocimiento simplificado de títulos extranjeros, migración laboral legal y regulaciones colectivas, así como, una naturalización basada en criterios objetivos y sin obtáculos financieros.
 

De Pakistán a Europa

La ponente invitada Zehra Khan explicó en su intervención los pasos dados para fundar en el 2009 el primer sindicato de personas empleadas en el servicio doméstico en Pakistán, dando así voz a millones de trabajadoras y trabajadores invisibles del sector informal. «Nuestro movimiento forma parte de una iniciativa global que exige responsabilidades a las empresas. Esto ha inspirado legislaciones que responsabilizan a las multinacionales de las condiciones laborales en sus cadenas de suministro. Las empresas europeas y suizas también tienen responsabilidades. La directiva de la UE y la iniciativa suiza sobre las empresas responsables son pasos importantes para lograr condiciones laborales justas».
 

 

Protección contra el despido y debate sobre Palestina

Por iniciativa del Tesino, las y los delegados decidieron por unanimidad elaborar una iniciativa de protección contra el despido para 2026. Además, exigieron al Consejo Federal que defienda, de manera clara, los derechos de las personas palestinas. En un emotivo debate se criticó la actitud del Unia al respecto. Las y los delegados aprobaron por unanimidad, en medio de gritos de «Libertad para Palestina», una serie de reivindicaciones en apoyo de la población civil palestina. Celine, del Grupo de Interés de la Juventud, subrayó: «Estamos del lado de las personas, no de los gobiernos, los intereses de poder o las estrategias militares. Esa es la esencia de la solidaridad sindical: no a la doble moral, no al silencio. Debemos detener el genocidio en Palestina y solidarizarnos con la población civil».