[Translate to Español:]
La marea violeta inundó las calles de Lausana el pasado 8 de marzo.
Trabajo
Política

Reducción de la jornada laboral, pieza clave para lograr más igualdad salarial

- Emine Sariaslan

El balance intermedio sobre el análisis salarial lo deja claro: la última revisión de la Ley de Igualdad de Género (GlG/LEg) es insuficiente. Las empresas ignoran la desigualdad salarial y el mandato de la Ley de Igualdad. Las brechas salariales llevan a las mujeres a la pobreza y a la dependencia económica. ¡Se necesita una reducción de la jornada laboral semanal! Muchas mujeres salieron a la calle el 8 de marzo para dar visibilidad a ésta y otras reivindicaciones.

Los resultados sobre los análisis de igualdad salarial publicados son preocupantes: una quinta parte de las empresas no ha realizado el análisis, un tercio no los ha sometido a revisión y la mitad no ha publicado los resultados. La revisión de la ley apenas ha reducido las diferencias salariales discriminatorias. A ello hay que añadir que las empresas no cumplen con lo estipulado en una ley ya de por sí insuficiente. ¡Esto es un escándalo!

 

Brecha salarial para las mujeres del 43%

En realidad, la verdadera magnitud de la discriminación es mucho mayor: las mujeres ganan un 43,2% menos que los hombres. La desigualdad salarial en el sector privado es de alrededor del 18%. Pero al calcular este porcentaje no se tienen en cuenta las pérdidas salariales de las mujeres por trabajar a tiempo parcial, lo cual afecta a dos tercios de las mujeres. Según el índice de la brecha salarial global de género (Gender Overall Earnings Gap, GOEG), la pérdida salarial en Suiza es del 43 por ciento. Este indicador incluye a todas las trabajadoras y trabajadores, teniendo en cuenta la tasa de empleo. De este modo, ofrece una imagen más clara de las diferencias salariales en Suiza.

 

 

Reducción de la jornada laboral: un factor clave para lograr la igualdad real

Suiza ostenta un triste récord: las personas que trabajan a tiempo completo tienen una jornada laboral semanal media de 42 horas. Este alto promedio de la jornada laboral semanal obliga a muchas mujeres a trabajar a tiempo parcial para poder conciliar el trabajo remunerado y el trabajo de cuidados. Las mujeres trabajan 30 horas a la semana sin remuneración alguna. Por ejemplo, en el cuidado de los hijos, las tareas domésticas, o bien, la atención a personas mayores y enfermas. Este trabajo no remunerado no solo mantiene en funcionamiento a la sociedad, sino que también es una de las principales causas de la dependencia económica de las mujeres. Las personas que trabajan sin recibir un sueldo tienen menos ingresos, están peor aseguradas y tienen menos tiempo para descansar o formarse. Por eso, las mujeres del Unia exigieron el 8 de marzo, con diversas acciones regionales, una reducción de la jornada laboral, sin reducción salarial, para todas las personas. Ello para tener más tiempo libre, más salud y más igualdad.

 

 

 

Urge una nueva revisión de la Ley de Igualdad

Como parte de la coalición contra la discriminación salarial, el Unia critica duramente las disposiciones legales insuficientes. El Unia reivindica:
•    La obligación de realizar análisis salariales regulares en todas las empresas, independientemente de su tamaño.
•    Inspecciones estatales y sanciones efectivas para las empresas que no tomen medidas ante la discriminación salarial.
•    Comunicación clara de los resultados a las empleadas y empleados.