El 21 de noviembre, decenas de personas, visiblemente satisfechas y llenas de orgullo, se reunieron en Berna. Entre ellas, había muchas personas afiliadas al Unia. A pesar de la nieve y el frío, se vivió un ambiente cálido y festivo. Todas manifestaron al unísono que lo habían logrado. Habían reunido alrededor de 105 000 firmas válidas para la Iniciativa por la Democracia y las habían presentado en la Cancillería Federal. Para ello, trabajaron día y noche. Cada firma representa esperanza, justicia y cambio.
Arbër Bullakaj, copresidente de la campaña «Vierviertel», expresaba así su satisfacción: «Ha sido un camino largo y pedregoso que ha requerido un gran esfuerzo por parte de todas y todos. Sin embargo, hoy estamos aquí, no solo con más de 135 000 firmas, sino también con un claro mensaje de cambio y progreso. Muchas personas nos advirtieron y dijeron que un pequeño colectivo de la sociedad civil no podría afrontar un proyecto de este calibre. Nos dijeron que, sin los grandes partidos y sindicatos, que son los que normalmente recogen la mayoría de las firmas, sería imposible reunir las firmas necesarias. 'Mejor posponerlo', decían, 'es demasiado arriesgado'. Pero creímos en ello. Creímos en la visión de que habría bastante gente que se uniría a nuestra causa. Y creímos en nuestra obligación de defender a los más de dos millones de personas que viven en este país y merecen más equidad y justicia.»
Hoy en día, solo las personas que tienen un permiso de establecimiento C y han vivido en Suiza al menos diez años, pueden solicitar la naturalización. Según un estudio, Suiza tiene, después de Chipre, las reglas de naturalización más estrictas de Europa. En los últimos años el Parlamento ha rechazado varias reformas legales tendentes a facilitar el acceso a la ciudadanía suiza. Así, en el verano de 2023, el Consejo Nacional rechazó varias iniciativas del Partido Verde Liberal (GLP/PVL), cuyo objetivo era reducir los obstáculos para obtener la ciudadanía suiza. Las fracciones de la Unión Democrática de Centro (UDC/SVP), la del Partido Radical Democrático (PRD/FDP) y la de El Centro (Le Centre/die Mitte), es decir, las de los partidos de la derecha y centroderecha, se pronunciaron, prácticamente en su totalidad, en contra. La Iniciativa por la Democracia quiere cambiar esto y seguir desarrollando la democracia en Suiza.
La Iniciativa «Mitenand» (en francés: «Etre Solidaires»), nacida en los años 70 como reacción a las preocupantes discusiones sobre la «extranjerización», que marcaban los debates públicos en Suiza y alimentaban el discurso del odio hacia las personas migrantes, hizo historia. Ahora, tras casi cincuenta años, volvemos a hacer historia, presentando una iniciativa popular, la Iniciativa por la Democracia, que aboga por la ampliación de los derechos de las personas migrantes. La Iniciativa por la Democracia exige una modificación en la Constitución Federal para facilitar la naturalización. Quiere poner fin a la arbitrariedad que prevalece hoy en día, dando un vuelco a los estrictos criterios de naturalización.Con la iniciativa se pretende reducir de diez a cinco años el tiempo de residencia legal exigido para tener acceso a la naturalización. Ello, independientemente del tipo de permiso de residencia. Además, habría que cumplir otros requisitos mínimos, como el tener conocimientos básicos de un idioma nacional y no haber cometido delitos graves. Tras la presentación, pueden pasar hasta tres años para que la iniciativa sea sometida a votación. Arbër Bullakaj señala: «Este no es un tiempo de espera, es un tiempo de acción.Continuaremos sensibilizando, informando y explicando a la población los obstáculos y la arbitrariedad a los que tantas personas tienen que enfrentarse en el proceso de naturalización.»