Migración
Entrevista

Integración laboral de las personas migrantes

- Imran Sariaslan
Hilmi Gashi vor einer Bücherwand

El pasado mes de noviembre tuvo lugar en la ETH de Zúrich un simposio sobre la escasez de mano de obra y la migración. Hilmi Gashi, el responsable de los Grupos de Interés del Unia, participó en el mismo y tomó parte en un taller sobre las personas migrantes y los/as jóvenes. Horizonte ha hablado con él sobre este tema.

Hilmi, en tu opinión, ¿cuáles son los mayores retos a los que se enfrentan las personas migrantes en el mercado laboral suizo?

Uno de los mayores retos es, sin duda, la discriminación estructural que sufren muchas de las personas migrantes. Empezando sobre las dificultades para tener acceso al mercado laboral, hasta las barreras en el trabajo y la promoción profesional. Por desgracia, hay muchos empleadores que, en lugar de tener en cuenta las aptitudes y la experiencia de las personas migrantes, se fijan, sobre todo, en lo que aún no pueden hacer. A ello hay que añadir lo que Rosita Fibbi, de la Universidad de Neuchâtel, definió como una "jerarquía de origen". Dependiendo del país de origen, a menudo, resulta más o menos difícil encontrar un empleo cualificado.

¿Qué medidas concretas se debatieron en el simposio para afrontar estos retos y mejorar la integración de las personas migrantes?

Debatimos diversas medidas para promover la participación igualitaria de las personas migrantes y superar la discriminación en el mercado laboral. Esto incluye, por ejemplo, la eliminación de barreras estructurales, tanto de naturaleza legal como social. Es importante que se reconozcan y promuevan las cualificaciones, competencias y experiencia que aportan las personas migrantes. Hay que facilitar el reconocimiento de los diplomas extranjeros. Además, en los Convenios Colectivos de Trabajo se deben establecer medidas para el reconocimiento de las cualificaciones y experiencia obtenidas en el extranjero. Ello sería relevante a nivel salarial y supondría un obstáculo menos para la promoción profesional.

Hilmi, en el simposio también se habló de la situación de las y los jóvenes. En tu opinión, ¿por qué es importante que las y los jóvenes reciban más apoyo a la hora de elegir una profesión y durante su aprendizaje?

Las personas jóvenes desempeñan un papel crucial para superar la escasez de mano de obra cualificada, pero muchas de ellas rechazan un aprendizaje o una profesión concreta debido a las malas condiciones laborales y salariales. Urge una mejor valoración del trabajo de las y los jóvenes, por ejemplo, mediante salarios más atractivos. Durante el aprendizaje el foco debe estar en formar adecuadamente a las y los jóvenes y no en utilizarlos -como sucede en ocasiones- como mano de obra barata. Hay que apoyar a las y los jóvenes durante su formación para que puedan desarrollar todo su potencial. Además, hay que mejorar su protección frente a la explotación, el mobbing y el acoso sexual. La salud y la seguridad en el trabajo juegan un papel muy importante a esta edad.

Has propuesto medidas concretas para la integración de las personas migrantes y para mejorar la situación de las y los jóvenes. ¿Qué papel desempeña el Unia en este sentido?

El Unia desempeña un papel crucial en la representación de los derechos e intereses de las trabajadoras y trabajadores, independientemente de su origen. Luchamos activamente frente al racismo, el acoso sexual y el mobbing en el lugar de trabajo. También luchamos para garantizar que las personas migrantes tengan mejores oportunidades de integración y que su potencial sea reconocido y promovido en una fase temprana. Con nuestro trabajo, luchamos por un mundo laboral inclusivo y justo en el que todas las personas tengan las mismas oportunidades, independientemente de su origen.